¿Cuál es el mejor modo de aprender?

Hoy os explicaremos cuál es la mejor manera de conservar aquella información que llega a nosotros.

Todos hemos leído alguna vez algún artículo y a los dos días nos hemos dado cuenta de que ya no recordábamos nada y esto, ocurre aunque nos pareciese el artículo más interesante del mundo (quizá en este caso tardamos 2 semanas en lugar de 2 días). Pero la cosa cambia cuando comentamos el artículo con otra persona o cuando se lo explicamos a alguien. En este caso, podemos recordarlo durante mucho tiempo aunque ya no sepamos dónde lo hemos leído.

Parece lógico pensar que a los estudiantes les ocurre exactamente lo mismo. Para ellos, estudiar un tema leyendo lo que aparece en un libro , aparte de aburrido, es casi inútil. Lo recordarán durante unos días (unas semanas a lo sumo) y luego lo olvidaran. Pero todo cambia si se trabaja con esa información; si se hacen resúmenes, esquemas, se hacen ejercicios o se comparan ideas con compañeros de clase.

A continuación, os dejamos una imagen que resume un poco esta idea de que lo que mejor se aprende es lo que se experimenta.

Como veis, la mejor manera de aprender es experimentar. Evidentemente, no todos los contenidos son fáciles de experimentar pero un niño aprenderá más fácilmente qué necesita una planta para crecer si ha de cuidar de una en clase (ha de ponerle tierra, vigilar que tenga luz, regarla,...) que si lee en un libro de teoría qué es lo que necesita una planta.

Como curiosidad, os diré que cuando se trata de enseñar, se aprende el 95% de lo que se enseña así que quizá el mejor modo de aprender, sea precisamente enseñar. Se pueden crear pequeños grupos de estudio en que cada uno ayude a los demás en lo que pueda y de esta manera, mejorar todos.